Semanas antes de la campaña electoral municipal del 2006, usted conversó con el entonces candidato, médico Martín Príncipe Laines, antes de ser elegido alcalde de Lince, sobre uno de los regidores de su lista, ¿Qué le dijo usted sobre ese regidor que finalmente salió electo?
Hablamos del actual regidor Andrés Vásquez Berlanga, quien estuvo implicado en actos de corrupción, porque durante la gestión del ex alcalde Waldo Olivos, donde también fue regidor, presionaba a los comerciantes  y a mí, exigiéndome coimas. Él personalmente me dijo que deberíamos darle S/.10,000.00 para que nos deje ocupar la vía pública y así poder vender nuestros productos. Nosotros éramos 52 comerciantes.

¿Qué sucedió entre febrero y marzo del año pasado cuando Martín Príncipe y Vásquez Berlanga ya eran autoridades municipales?
El alcalde Príncipe me prometió que cuando entrara a la alcaldía no existirían coimas. Él me pidió la relación de los comerciantes que ocupábamos la vía pública, de los vecinos y de las tiendas comerciales aledañas. Todos esos documentos los presenté los primeros días de enero del 2007, pensé que el alcalde tomaría acciones. En cambio, tomó represalias en contra mía, le dijo al entonces gerente Jesús Navarrete, que me desalojará, porque no me quería ver en el distrito.

¿Cuáles fueron las acciones que realizó el alcalde en su contra?
El jefe de la Policía Municipal, Tito Basurto Feliz junto a decenas de serenos, se acercaron a mí, alrededor de las 4 de la tarde y me golpearon. Estuve en cama 5 días. Fui al médico legista e interpuse una denuncia ante la 54º Fiscalía Provincial Penal de Lima.

¿Por qué los comerciantes que estaban a su alrededor no le defendieron?
Ellos gritaban, “por qué no buscan a los fumones y rateros, en vez  meterse con un comerciante”, los serenos amenazaron si se metían.

¿Cuántos policías municipales se acercaron a usted?
Se acercaron entre 25 a 30 miembros del serenazgo y de la  policía municipal.

¿Qué sucedió luego de la denuncia que presentó ante la 54º Fiscalía Provincial Penal de Lima a cargo de la fiscal Emperatriz Tello Timoteo?
Volví a mi trabajo como vendedor de frutas y verduras. El 12 de marzo a las 7.30pm, me volvieron a agredir alrededor de 40 miembros del Serenazgo y la policía municipal. Ellos me agarraron del  cuello, me golpearon, me quitaron mi triciclo y quede desmayado en el suelo. Con un vecino que me apoyó, fuimos a la Comisaría de Lince. El comisario envió dos policías para verificar el decomiso de mis cosas. Yo fui víctima de un robo y no de un operativo de decomiso. Porque en Lince se ha derogado el decomiso y eso lo sabe muy bien  el alcalde Príncipe.

Según la normativa municipal, sólo existe decomiso, cuando el producto pone en riesgo la salud de las personas, ¿qué le robaron?
Me robaron mi triciclo, mi campana, mis frutas y verduras, por un monto de S/.800.00. Lo perdí todo. Para colmo, se acercaban las fiestas navideñas y no pude comprar ni siquiera un panetón a mis hijos o ropa de segunda.

¿Es cierto que durante un año y dos meses no pudo trabajar?
Sobreviví con la ayuda de mis vecinos y de la regidora Carmen Gondolias Pastor, quien me apoyó económicamente para darle de comer a mis hijos. Incluso, ellos dejaron de estudiar, porque el alcalde me quitó mi herramienta de trabajo. Además, uno de mis amigos me contó que el regidor Vásquez  Berlanga le dijo: “no vas a encontrar a tu amigo, porque ya lo mandé a desaparecer”.

¿Por qué el alcalde Martín Príncipe Laines este año ha ordenado que le devuelvan el triciclo?
Me recomendaron hablar con el auditor del Órgano de Control Institucional, Ing. Vitilio García, para que él interceda a fin que me devuelvan mi triciclo. El auditor se comunicó con el alcalde y la gerente municipal encargada, Irene Castro Lostaunau. En una reunión reconocieron el error y el abuso de autoridad que cometieron conmigo. Me dijo Hugo Niembro-Prieto García, gerente de Seguridad Ciudadana, que me iban a devolver mi triciclo y mi fruta de un valor de S/.400.00, delante del contralor y la gerenta.

¿Qué es lo que la Municipalidad de Lince finalmente le entregó?
Me devolvieron el triciclo, me dieron S/.40.00 para pintarlo y arreglarlo.

¿Pero no existía un acta de decomiso de sus pertenencias?
No, porque yo los denuncie por robo ante la Comisaría y no por decomiso.



¿Es cierto que mientras arreglaba su triciclo, dentro del local de Serenazgo de la Municipalidad de Lince, usted fue testigo de actos de corrupción?
Un funcionario de la municipalidad llamado Arturo Rojas Flores consiguió en el lapso de 20 minutos una donación de bolsas cemento, arena gruesa, ladrillos y hasta un par de albañiles para construir unas jaulas para perros de la calle. Todos sabemos que para que los funcionarios utilicen los objetos de una donación, primero debe ser ésta aprobada en sesión de Concejo Municipal.

Usted también ha visto que el gerente de Seguridad Ciudadana, Hugo Niembro-Prieto García, participó en la venta de tres vehículos de propiedad de la Municipalidad de Lince.
Sí. Habían tres vehículos: el primero modelo 4x4, marca Ford de color rojo; un tractor y un vehículo Datsun, modelo 4x4 de color blanco. El señor Arturo Rojas me preguntó: ‘¿cuánto me darán por cada vehículo?’, yo le respondí: ‘cerca de S/.1,000.00, porque son casi chatarra’. Y lo vendieron todo a S/.6,000.00.

Esos S/.6,000.00 nunca ingresaron a las arcas de la Municipalidad de Lince. Pero eso no es todo, malos funcionarios compraron cinco camionetas para el Serenazgo a cerca de US$30,000.00 cada una, ¿Cree usted que hay regidores que quieren fiscalizar al alcalde Príncipe Laines o todos están del lado del oficialismo?
Exacto, las camionetas tienen un valor de S/.98,000.00 aproximadamente. Sólo la regidora Carmen Gondolias Pastor tuvo el valor de decirme que dentro de la municipalidad existen funcionarios que están cometiendo serias irregularidades y actos de corrupción.